Durante años, el viento y el agua han excavado cuevas que a día de hoy atraen a millones de turistas todos los años al Algarve. 

Nosotros salimos desde Málaga en coche, siguiendo el GPS, que te lleva directamente. Pasamos por Estepona, Sevilla, Huelva y nos adentramos en Portugal. Después de entrar en Portugal, a la hora y poco llegas aquí. Te lleva directamente a un parking gratuito (un descampado), donde aparca todo el mundo. Después, bajas hacia la cala donde hay un restaurante y directamente la playa de Benagil. Es muy pequeña la cala, así que no tendrás pérdida.

Os dejo aquí abajo de la cala que veréis al bajar del parking:

A la derecha encontraréis el pequeño bar-restaurante que os digo, que si vais a la hora de comer estará lleno. Tiene buenos menús para comer hamburguesas o perritos calientes. 

Justo al lado, encontraréis un pequeño puesto de madera que es donde se compran los billetes para ir a la Cueva de Benagil.

Podéis contratar el barco o sino un kayak para ir por vuestra cuenta. Personalmente, recomiendo el kayak, ya que aunque vayas a tener que hacer un poco de deporte, tienes más tiempo para disfrutar de la cueva pudiendo aparcar el kayak dentro y hacerte unas cuantas fotos. En cambio, el barco solo "se asoma" a la cueva, y se va. No permite a nadie bajarse, por lo tanto habrás pagado por asomarte a la cueva 3 minutos.

Si vais en kayak como nosotros, saldréis desde la cala y nosotros teníamos 2 horas. Nos costó 20€ cada uno. Tal vez os parecerá desde la cala que la cueva está muy lejos, pero está justo a la vuelta de la esquina, como en la imagen de la derecha. Salís de la playa, avanzáis un poco, y encontráis la cueva. Eso sí, mucho cuidado con los cientos de kayak, tablas, y sobre todo barcos que hay. Nosotros fuimos en pleno agosto y estaba lleno, y nos llevamos un par de sustos con más de un barco repleto de turistas a punto de embestirnos.